ANDREA MARI

Como consultora de moda, coach especialista en autoestima, imagen y desarrollo personal, creo que nuestra forma de vestir es sobre identidad. El vestuario es comunicación no verbal y en esta comunicación es fundamental escucharnos.
Si fuera posible encajar todas en siete estilos universales, cinco tipos de cuerpo, doce paletas de colores, yo no sería consultora de moda y tampoco coach de autoestima. Somos infinitas, no hay porqué encajar en moldes.
El estilo no es sobre la ropa que mejor nos funciona, es más bien sobre un universo de posibilidades que traduce lo que somos. Son múltiples referencias, consciente e inconscientemente que nos hacen elegir y encontrar bonitas ciertas prendas y accesorios. Habla de lo que somos. Nuestros cuerpos no son manzanas, peras, triángulos invertidos o ensaladas de fruta. La moda que amo no victimiza y tampoco condena. El amor a mi trabajo es el amor incondicional por el arte y la expresión hecha vestimenta y en mi experiencia, solamente con conocimiento y principalmente con un autoconocimiento es que se logran romper las reglas.